Son muy cómodos para llevar poca cosa dentro del bolso (o de viaje) o para ahorrar dinero en productos, son los típicos 2 en 1 o “multifunción”.
Hay coloretes multiusos que sirven también para ojos y labios, hay lápices de ojos que se usan también en los labios, una sombra de ojos del tono adecuado se puede usar también para las cejas.
Al mismo tiempo también vosotras mismas podéis buscarle salida a un producto que no os gusta mucho: un corrector de un tono oscuro sirve como base para sombras.
Si vais a tirar un rimel, lavad el cepillo porque os puede servir para peinar cejas y pestañas.
Una barra de labios puede servir de colorete si la difumináis bien.
Si habéis comprado una base de maquillaje demasiado oscura, se puede aclarar con unos polvos translúcidos o mezclada con crema hidratante y si eso no funciona se puede usar para hacer el contorno (una base más clara que vuestra piel puede hacer de iluminador).
Unos polvos bronceadores pueden usarse también para el contorno (a poder ser que no tengan muchos brillitos).
Los coloretes pueden servir como sombras de ojos.
Un rimel transparente sirve también para peinar y fijar las cejas.
Y así sucesivamente, la cosa más versátil son las brochas y pinceles porque sirven para mil cosas diferentes y se les puede intercambiar la función dependiendo de lo que busquéis, muy útil.
Que buenas ideas, algunas no las sabia! jeje
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